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lunes, 2 de agosto de 2010

4. Momentos

    Aquella noche le dio por ver "La Casa de los Espíritus". Aparte de acostarse y tener la sensación de que la tía Férula merodeaba por la habitación, aquella noche también pensó mucho. Hay un momento en la película (lo sé, en el libro también...) en el que Meryl Streep le dice a Jeremy Irons que no volverá a hablarle en la vida. Y lo cumple. Lo quiere, lo abraza, lo besa... pero nunca más le vuelve a hablar. Así que en la oscuridad de aquella calurosa noche, pensó que el silencio no siempre tiene por qué ir acompañado de ausencia de sentimientos. O de lo que fuera aquello que ella echaba de menos. Ese pensamiento le arrancó una sonrisa y, en cuanto el calor la dejó, se quedó dormida.


    Había pasado unos días estupendos en compañía inmejorable y pensó que aquel viaje de fin de semana al pueblo de su madre, aquel cambio de aires que tanta falta le hacía, sería la guinda en el pastel, aquello que la acabaría de animar. En cierto modo, el cambio de aires le vino bien. Pero estar en aquel pueblo, sin internet, la hizo pensar más de la cuenta... Y la ausencia de internet la llevó a leer mensajes antiguos, recuerdos que afloraron en su mente sin ella querer y que amenzaban con no dejarla dormir aquella noche. Le echó la culpa al calor. Pero era mentira... corría una brisa de lo más agradable. Le echó la culpa a la almohada... pero también era mentira.
    Conducir la relajaba. Pero era bajarse del coche y pensar de nuevo. Incluso la película más añeja y cañí aquel sábado por la tarde intentó arrancarle una lágrima. Y casi lo consiguió.

    El viaje de vuelta no fue mucho mejor. Escuchar música que le volvía a hacer pensar no fue tan buena idea... Pero iba acompañada, y odiaba llorar en público. Así que esperó a llegar a casa. Tampoco lloró. Pero la noche acababa de empezar, y aún no se había metido en la cama.

"La casa de los espíritus"



Todos los momentos que pasé junto a ti han pasado a ser recuerdos de cuando fui feliz.... Sería inútil el negarlo, pues todavía estás en mí. Y si volviéramos a vernos... ya no sería como ayer. Miles de momentos que pasé junto a ti. Miles alegrías que me hicieron tan feliz. Miles de recuerdos que me hicieron soñar. Miles de nostalgias que en mi mente están...

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